Financiación en Moneda Local

En 1996 se consiguió el primer bono de infraestructuras en moneda local durante el desarrollo de la autopista Ruta 5, Talca-Chillán, en Chile. Se utilizó por primera vez la garantía de una aseguradora «monoline», que luego se extendió en todo el programa concesional del país.

Financiación privada para grandes proyectos

La financiación de la autopista 407 ETR, en Canadá, o la de otros proyectos complejos, como la M4/M6 en Irlanda, son algunos ejemplos. La financiación realizada en 2003 en la autopista M4/M6 fue la primera del programa irlandés y demostró que es posible reunir inversión privada para contratos muy exigentes en reparto de riesgos y, además, lograrlo a precios competitivos.

Financiación a largo plazo

La refinanciación con bonos de 2001 en la autopista Via do Infante, en Portugal, supuso el primer bono de proyecto de Portugal y el primero, realmente a largo plazo, de Europa continental, con un vencimiento de 26 años.

Financiación de "Managed Lanes"

La autopista LBJ, en Estados Unidos, se convirtió en el mayor proyecto de colaboración público-privada de la historia de la historia de los EEUU, en el momento de su cierre financiero. Se trataba del nuevo modelo de Managed Lanes que ahora se está extendiendo por el resto del país.

Financiación tras la gran crisis

En 2014 las autopistas M8, M73 y M74, en Escocia, lograron la primera emisión de un bono de carreteras en el Reino Unido desde el comienzo de la crisis financiera en 2008. En 2017 el proyecto Western Roads Upgrade, en Australia, alcanzó un hito similar al lograr cerrar el primer bono para una autopista ‘greenfield’ tras el inicio de la crisis.